¿Para qué sirven las matemáticas? Esta es sin duda la pregunta que más repiten los alumnos año tras año. Y antes de eso, muchos padres no sabían qué responder, ¡excepto que era una de las materias principales que tenían que estudiar y aprobar! De hecho, las matemáticas son una parte importante del desarrollo de la primera infancia porque les ayuda a desarrollar la personalidad, pensar lógicamente y aprender a razonar.
Muchos estudiantes asocian el tema con problemas complejos a resolver y conocimientos abstractos que no creen que puedan aplicar en su vida adulta. Sin embargo, las matemáticas siempre han sido parte de nuestra vida diaria, desde contar el tiempo dedicado a las actividades hasta determinar la edad de nuestros amigos y familiares.
También desde el punto de vista académico, las matemáticas son una gran ciencia, ya que sustentan cualquier método científico, ya sea en física, estadística o historia, independientemente de la disciplina. Pero más aún, aprender matemáticas tiene grandes beneficios, a veces desconocidos, para el cerebro:
1. Fomentan el pensamiento analítico
Este es nuestro pensamiento predeterminado, que nos ayuda a dividir los argumentos en premisas, observar las condiciones existentes y juzgar su verdad. Ante problemas matemáticos, recopilamos datos, analizamos sus relaciones y proponemos soluciones. La capacidad de entender las matemáticas y llegar a soluciones lógicas preparará nuestra mente para resolver problemas prácticos y tomar decisiones que eviten errores o engaños.
2. Desarrollo de la capacidad investigativa
El pensamiento analítico descrito anteriormente también ayuda a mejorar nuestra capacidad para explorar y comprender el mundo que nos rodea. Las matemáticas nos permiten razonar mediante fórmulas lógicas utilizando datos reales comprobables. Nos permite buscar en el mundo respuestas basadas en evidencia, no solo creencias o sentimientos.
3. Favorecen la agilidad mental
Resolver un problema matemático requiere enfocarse en encontrar la solución. Este simple gesto, repetido muchas veces, entrena la concentración y por lo tanto la agilidad mental. De esta manera, podrán tomar decisiones más rápidas, comprender mejor los nuevos conceptos y enfrentarse a situaciones más complejas que, de otro modo, podrían resultar desafiantes.
4. Cultivar la capacidad de pensar.
Al recibir clases de matemáticas para niños, desde pequeños ya aprendemos a pensar, es decir, a ser capaces de explicar cómo funcionan las cosas. Analizar, ordenar y expresar las ideas de forma clara y coherente es fundamental para que los demás entiendan lo que queremos transmitirles.
5. Fomentar la inteligencia y la curiosidad.
Siempre se ha dicho que las matemáticas son la madre de todas las ciencias. ¿Por qué? Porque son la base de muchas disciplinas de la ciencia y la tecnología y de muchas actividades de nuestra vida cotidiana. Sin ellos, no seríamos capaces de entender ciertos fenómenos, como el manejo del dinero, entender el tiempo o simplemente cocinar según recetas.
En definitiva, está claro que las matemáticas tienen muchas aplicaciones concretas y prácticas en nuestra vida cotidiana: cocinar, comprar, alquilar, etc.
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Tanto si quieres ser matemático como si no, esta materia es una ciencia definitoria en la vida cotidiana: sin las matemáticas, no se habrían creado muchas tecnologías e inventos. ¡Las matemáticas también son necesarias en la carrera! Incluso si es un trabajo no científico. Las secretarias deben usar Excel, los vendedores deben saber calcular con la cabeza, los arquitectos deben calcular ángulos.
Por lo tanto, las matemáticas te harán más paciente y más duro. ¡Intentalo! ¡Te sorprenderán los resultados! Por eso, contacta cuanto antes con un profesor particular de matemáticas si lo necesitas y entiende todos los conceptos.
Las matemáticas sirven para crear modelos de la realidad, y se podría decir que la naturaleza se puede escribir en un lenguaje matemático… Pero esa es otra historia, ¿no?
¡Antes de que te des cuenta, estarás usando las matemáticas todos los días!